Si sientes
que tu vida está algo agitada, con mucha ansiedad, estrés, con dificultades
para dormir, con desgano y con poca atención a las actividades cotidianas, tal
vez necesites sumergirte en la calma mental, armonía y equilibrio personal, que
brindan las diversas técnicas de meditación. Actividades que se llevarán a cabo
en un taller práctico que se dictará en Rukalihuen el sábado 17 de enero
próximo.
Esta es la
ocasión en que los participantes podrán explorar el Zen, prácticas Budistas,
Chi-kung, (Nei-Kung), (Taoismo), (Tai-Chi), Ninjutsu y Raya Yoga. Diversos
sistemas de meditación y relajación, algunas son estáticas, otras en movimiento
o desplazamiento leve, detallan los instructores Susana Libuy y Daniel Cofré.
La finalidad
es que las personas conozcan estás distintas modalidades y luego puedan adoptar
aquella que más les gusten o acomoden. De esta manera los invitamos a descubrir
sus propios caminos de meditación, para más adelante tal vez, continuar por alguna
senda de autoperfeccionamiento trascendental.
Estas
dinámicas mentales y corporales pueden adaptarse a la diferentes condiciones
físicas de los asistentes, por lo mismo en el taller pueden participar niños
desde los 8 años, jóvenes, adultos y adultos mayores con o sin dificultad en
sus desplazamientos y posturas.
Lo esencial
es tener una buena predisposición al aprendizaje y sacar el mejor provecho de
lo aprendido y poder aplicarlo en sus quehaceres cotidianos para poder fluir
equilibrada y armoniosamente en cada momento de la vida, mejorando inclusive
las relaciones interpersonales, agrega
Daniel.
Ambos
instructores han experimentado a lo largo de su vida, bienestar integral tras la práctica de las diversas
meditaciones. A Susana le ha ayudado en el manejo de sus emociones, a estar más
consciente y en paz consigo misma y el entorno. “Igualmente con el Taichi o
Chi-kung que es una meditación en movimiento, me proporcionó conexión con mi cuerpo,
superar problemas de salud y trabajar mejor las energías”, relata.
Daniel por
su parte confiesa que aparte de lograr salud física, mental y emocional, ha
profundizado en el aspecto espiritual, virtud que le permite hoy poder ayudar a
otras personas a encontrar su propio sendero trascendental camino hacia el
autodescubrimiento, la autosuperación y la felicidad plena.