Cuando ya nuestro hijo deja de ser un bebé y se convierte en un niño pequeño entre los dos y cuatro años debemos seguir incentivando ese apego entre madre e hijo, para ello está el taller Jugando a Yoga que se realiza durante todo el año en Rukalihuen, cuyo objetivo es facilitar la unión sana, profunda y divertida entre madre e hijo a través de juegos musicales y asanas o posturas de yoga que propiciaran en el pequeño la concentración y la conciencia corporal.
Si bien las
dinámicas de las clases son dirigidas por la monitora, es la madre con su
participación y entusiasmo quien facilita las diferentes técnicas en su hijo o
hija.
Las clases
incluyen varios aspectos a trabajar como los siguientes:
1.-
Activación
•
Juegos musicales
•
Rimas
para reconocer geografía corporal
•
Danzas
o cantos dirigidos para elongar.
•
Gimnasia
Cerebral.
2.-Presentación
o círculo de encuentro
•
Relato
de cuentos para conceptos y beneficios
del Yoga y Asanas (posturas corporales).
•
Sonidos
o mantras para aquietar la mente.
•
Ejercicios
simples de respiración o Pranayamas.
3.-Posturas
o asanas
Se presentan 3 posturas en cada sesión,
y luego se les invita a los niños a realizarlas relatando un cuento.
4.-Relajación
Los niños permanecen recostados en una colchoneta,
mientras la monitora con música los va guiando en la respiración para soltar tensiones,
para luego llevarlos a un lugar imaginario donde logren aquietarse y sentirse
bien.
5.- Colorear asanas o mandalas:
La monitora comenta con los niños el
significado de la palabra Mandala, y les entrega imágenes para pintar y de
igual forma con las asanas o posturas de Yoga.
Los niños pueden asistir a estas clases
con un abuelo, tío u otro familiar cercano en caso que la madre no puede
acompañar a su hijo hija.
Finalmente el cierre de las clases
incluyen danzas circulares y la frase positiva: “El amor, la
alegría y la paz están en mi corazón”.
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