jueves, 28 de agosto de 2014

Curso Formación en Constelaciones Familiares, se inicia en abril de 2015 en Rukalihuen



































“Aquel que ama de donde viene, podrá amar donde ésta y sabrá amar hacia donde irá”, esto es el lema de una persona que ha integrado los vínculos con sus padres en su corazón. Seres fundamentales en nuestra existencia pues a través de ellos llegamos a este mundo y recibimos parte de nuestro destino, explica Siam (Carlos Aguirre), Terapeuta en Constelaciones Familiares.

Cuya disciplina está basada en la terapia familiar desde un enfoque sistémico y con una visión transgeneracional. Su fin es establecer los vínculos de amor en la familia de origen incluyendo a los antepasados. Este amor debe volver a fluir en la familia siguiendo "Los Ordenes del Amor o Los Ordenes de la Vida", lo que se traduce en una existencia más plena, liviana, próspera, describe el facilitador.

Este método de configurar las constelaciones familiares enfocado hacia la solución, es obra del alemán Bert Hellinger, uno de los terapeutas claves del mundo psicoterapéutico actual en esta materia. Gracias a sus conocimientos en dinámica de grupo, terapia primaria, análisis transaccional y terapia sistémica y familiar logró pulir esta disciplina, describe el especialista.

En cuanto al trabajo terapéutico, Siam nos revela que dentro de los temas más recurrentes que se trabajan en las constelaciones, están los divorcios, enfermedades con síntomas psicosomáticos, adopciones, asesinatos, suicidios, etc, pero el más común es la muerte. Se refiere a personas que están conectadas inconscientemente con algún fallecido de su familia o con aquellos parientes que no conocieron (pero para sus antepasados representa una pérdida trascendente).

A nuestros fallecidos se les llora, se les despide y después se les integra a nuestro corazón, sólo así podemos mirarlos con amor, con respeto, con dignidad y hasta con alegría. Sin embargo cuando esto no sucede, la persona termina siendo atrapada por este “dolor no resuelto” y como consecuencia las generaciones siguientes heredarán la conexión con este fallecido…hasta que alguien se atreva a honrarlo y a mirarlo con un profundo amor. Es decir que realice esa integración amorosa.

 Como es una disciplina que toca lo trascendente del ser humano, tendrá mucho mejor resultado quien tenga la disposición interior y exterior de avanzar en su vida. Si alguien quiere constelar y se siente resistente (en el fondo quiere permanecer tal como está), es mejor que siga así.

En ese caso el Constelador (a) debería detectar esto y no hacer nada con esa persona y dejarlo tal cual está. En cambio, si esa persona no es detectada por el Constelador (a) y se le hiciese una constelación, esto podría empeorar su situación y alejarlo de esta bella herramienta, aclara Siam.

Todos estos aspectos se abordan en los talleres de Constelaciones Familiares, y lo bueno además es que quienes deseen formarse en esta disciplina, podrán hacerlo a contar de abril de 2015 en Rukalihuen.

Especifica que la primera Fase A de estudio de este curso, está dirigido a toda la comunidad sin distinción. Entre los contenidos destacan adquirir un profundo conocimiento de la filosofía transgeneracional de las constelaciones familiares, ello le da herramientas para vivir la vida en todas sus dimensiones con más balance, cuyo resultado es mayor plenitud.

La segunda Fase B, a todos los que cursaron la Fase A y quieren ser Facilitadores en esta disciplina o para  aquellos que se formaron en Constelaciones y quieran reforzar su capacitación.

Los requisitos para realizar el curso son:

*Ser mayor de 23 años.
*Enviar curriculum con foto a color y adjuntar una carta donde se exponga la motivación por cursar esta formación.
*Deben inscribirse en Rukalihuen o bien enviar sus datos al mail: rukalihuen@gmail.com

Todo aquel que deseen contactarse con Siam o bien conocer más de su profundo trabajo, pueden visitar la web: www.unisiam.cl o el Facebook: Unisiam.




miércoles, 27 de agosto de 2014

Purifica tu mente y tu cuerpo con Hatha Yoga








































Si bien Cristina recibió influencia del yoga estando en el vientre materno, no fue hasta alrededor de los 17 años cuando comenzó a practicarlo en forma regular. “Ha sido una gran herramienta para desarrollar la consciencia y la presencia en las actividades de la vida diaria, y así mantener mi cuerpo y mente estable ante las crisis y fluctuaciones del entorno”. 

Este último año he incorporado el yoga en mis actividades laborales con buenos resultados como complemento la terapia de mis pacientes y como una innovación en el aprendizaje de estudiantes de kinesiología  devela la instructora de Hatha Yoga y kinesióloga, Cristina Morales, quien imparte esta disciplina en Rukalihuen.

La profesional nos explica que la palabra yoga deriva de la palabra sanscrita ”yuj” que literalmente significa “juntar” o “unir”, así el fin último del yoga es unir el alma individual con el alma universal. De este modo el Hatha yoga tiene la finalidad de purificar la mente y el cuerpo.

La sílaba “Ha” significa “sol” o la energía pránica o vital  que gobierna el cuerpo físico, mientras que “tha” denota la luna o la energía mental (chitta).
Por conclusión el Hatha yoga une y equilibra el cuerpo y la mente mediante asanas (posturas y movimientos físicos), Prāāyāma (ejercicios de respiración), Śa karmas (técnicas de limpieza), Mudrā-s (gestos o actitudes mentales),nāda (sonido) y Bandha-s (cerraduras de energía).

El yoga es uno de los 6 sistemas ortodoxos de la filosofía india. En la filosofía Védica y en los Tantras en tanto, se dice que tiene sus raíces alrededor de 5000 A.C, sin embargo no existió un texto sistemático de guía para el aspirante si no hasta 400 A.C cuando la práctica y el conocimiento del yoga fueron recopilados, coordinados y sistematizados por Maharishi Patanjali en su clásico trabajo los Yoga Sutras.

Entre los beneficios de practicar Hatha Yoga, destacan su influencia positiva en la salud y en todos los órganos y sistemas, especialmente en el sistema nervioso y endocrino. Asimismo ayuda a desarrollar la consciencia corporal y el alineamiento postural, la flexibilidad, fuerza y coordinación neuromotora. Mejora el sistema respiratorio, la circulación cerebral y el sistema inmune.

Cristina especifica que en sus clases se realizan yoga asanas o posturas dentro de variadas secuencias de sincronización de la respiración y el movimiento. Para movilizar la energía vital se trabaja con bandha-s (cerraduras internas), mudrā-s (gestos) y kumbhaka-s (retenciones y suspensiones de la respiración), el uso de mantras (sonidos) y prāāyāma (ejercicios de respiración).

No existen contraindicaciones para practicarlo, cualquier persona interesada puede hacerlo y beneficiarse con esta milenaria disciplina mediante la guía de un instructor calificado, aclara la joven, quien cuenta que el yoga siempre le fue natural pues sus padres lo practicaban junto con la meditación trascendental antes de que ella naciera. “De hecho mi madre viajó a la India a aprender ayurveda cuando estaba embarazada de mi”.




Vive un embarazo consciente con Kundalini Yoga Prenatal



































Si estás embarazada y deseas vivir una gestación consciente y conectada con tu cuerpo y tu bebé, te invitamos a participar en las clases de Kundalini Prenatal en Rukalihuen, cuya técnica consiste en la práctica de rutinas de ejercicios físicos y meditaciones las cuales tienen como finalidad esencial: fomentar el vínculo entre madre e hijo, revela la profesora, Paulina Sepúlveda.

El kundalini está basado en la tradición del Kundalini Yoga que fe traída a occidente por el maestro Yogui Bhajan, especifica la instructora.
Entre los múltiples beneficios de practicar esta técnica, destacan la ayuda para vivir todo el proceso de embarazo, en lo físico contribuye a sentirse más activa, a disminuir los malestares típicos como las nauseas o mareos, y en lo psico emocional, a estar de mejor ánimo, más tranquila y menos ansiosa, y por cierto disfrutar de esta hermosa etapa.

Igualmente algo crucial, es que nos prepara para experimentar un trabajo de parto, empoderada, serena y segura, advierte la experta.

En cuanto a las estructuras de las clases, aclara que está compuesta por una serie de ejercicios de respiración, posturas físicas de elongación, fortalecimiento y alineación. Luego hay un tiempo de relajación, y para finalizar con una meditación, la cual tienen por objetivo trabajar los miedos, reforzar la autoconfianza y elevar el espíritu, honrando este tiempo sagrado en que un nuevo ser humano se está gestando en el vientre. Por cierto, en estas dinámicas, incluimos, cantos de mantras para potenciar ese sentimiento de conexión con el bebé.

A todas las mamitas que anhelen vivir una experiencia hermosa y tan necesaria en está época, las invitamos a nuestras clases, las cuales no tienen contraindicación. Sin embargo para la tranquilidad de las alumnas, es recomendable que cuente con la autorización del médico para la realización de los ejercicios, detalla Paulina, quien se inició el 2004 en el kundalini, el 2007 se formo como instructora y el 2008 se especializó en yoga prenatal.

“Recomiendo el yoga a la embarazadas y a todas las personas en general, pues es una forma de vida que me permite mantenerme más saludable, tranquila y feliz, y me ayuda a sobrellevar los momentos difíciles o salir delante de instancias complicadas”, puntualiza la instructora.








Devuelve la vitalidad a tu organismo con la Naturopatía o Medicina Natural



































“Desde muy chica sufrí de alergias, tome muchos antihistamínicos y corticoides hasta los 13 años. Sin embargo a esa edad decidí no tomar ni un remedio más, pues algo del concepto de homeostasis que vi en la clase de biología me hizo sentido: el cuerpo siempre tiende al equilibrio y la sanación. Luego más grande me volví vegetariana y realmente mi vida mejoro en muchos aspectos”. Esta es la vivencia de sanación de Daniella Vignolo, médico y terapeuta de medicina natural que hoy ejerce su vocación en Rukalihuen.

La medicina Natural o Naturopatía es la ciencia que estudia las propiedades y las aplicaciones de elementos naturales (vegetales, agua, sol, tierra y aire) con la finalidad de mantener y/o recuperar la salud.

Entre sus múltiples beneficios, está prevenir la aparición de enfermedades, ya que restaura la vitalidad del organismo. Ayuda a mantenernos activos, aclara el pensamiento y devuelve la energía que muchas veces nos hace falta, especifica. Uno de los síntomas de recuperación que experimenta una persona es la liberación de toxinas o medicamentos sintéticos, claves para la sanación.

En ocasiones este proceso de limpieza del cuerpo, puede provocar algunas manifestaciones indeseadas o la denominada crisis curativa, que consiste en la reaparición o empeoramiento de los síntomas de base, todo depende de que tan intoxicado esté el paciente. Por ejemplo algunas señales son el aumento de la necesidad de orinar (la orina tiene mal olor), cambio de color en las deposiciones, sudoración, etc.

Como son síntomas pasajeros, la persona no debe inquietarse, al contrario es una clara evidencia que el proceso de sanación ha comenzado. Aún cuando hay pacientes que no los manifiestan, enfatiza la profesional.

Así durante el primer mes, la mayoría de los pacientes baja de peso, y tras unas dos semanas de adaptación al régimen alimenticio, comienzan a sentirse con más vitalidad y energía. El cuerpo más liviano y la mente más serena.

 En cuanto a la terapia en sí, consiste en recabar antecedentes del paciente, motivo de consulta, historia familiar, etc. Luego se le prescribe el régimen alimenticio que deberá seguir, al igual que las medidas físicas que correspondan como friegas, baños de agua fría, cataplasmas de barro entre otras. Se recetan también vitaminas, minerales o algún medicamento homeopático que ayude a potenciar el efecto que se persigue, explica Daniella.

Dentro de las dolencias físicas que más se ven en la consulta, son las enfermedades crónicas y afecciones que alteran constantemente la calidad de vida de las personas como trastorno digestivo funcional, gastritis, enfermedades inflamatorias intestinales, alergias alimentarias, enfermedades autoinmunes (artritis, lupus) y cáncer. También la depresión y el trastorno de pánico, agrega la joven quien en sus años de estudiante de medicina, ya se inspiraba por inculcar en sus pacientes una sanación integral, incluyendo el cuerpo físico, mental y energético. Si excluimos alguno es difícil poder sanarse.

En ese sentido, se siente bastante optimista, pues considera que actualmente muchos de sus colegas se están abriendo a esta nueva visión. Por ello es clave contar con lugares de prestigio donde se puedan formar terapeutas y a la vez se promueva la investigación en esta materia.