Si eres profesor, psicólogo, monitor, facilitador, etc y sientes la
necesidad de innovar o hacer algo distinto en tus clases con tus alumnos para
cautivarlos y a la vez estimular su aprendizaje, tal vez este Taller
“Estrategias Creativas para el trabajo con Niñas y Niños”, sea la oportunidad
para potenciar tu quehacer.
Como su nombre lo evoca el eje primordial del Taller es la Creatividad,
es decir el uso del pensamiento divergente por excelencia. Es una habilidad
para la vida de suma utilidad para los distintos ámbitos de acción del ser
humano, afirma la instructora del taller, la psicóloga Bárbara Muñoz.
La creatividad permite encontrar nuevas soluciones a los problemas que
nos presenta la sociedad actual y el hecho de expresar esas ideas o
sentimientos de variadas formas nos genera una sensación de bienestar interno,
confiesa.
Incorporar la creatividad en el trabajo con niñas y niños, a través del
juego sin duda es el mejor camino, pues nos da la posibilidad como adultos de
acercarnos a su forma de vincularse con el mundo y a sus espacios internos.
¿Qué ocurre si perdemos la creatividad?, a juicio de Bárbara, ello se
refleja en los problemas de la vida cotidiana, vamos repitiendo un
comportamiento una y otra vez con el mismo resultado, y no concebimos otra u
otras formas de hacer las cosas. Claramente esa forma tan rígida nos trae una
sensación de estancamiento y falta de satisfacción con la vida.
El mayor desafío de dar rienda suelta a nuestra imaginación es para
quienes trabajamos con pequeños, pues la misión es canalizar ese enorme
potencial que posee cada niña o niño, es decir convertirnos en “un catalizador
del pensamiento creativo y no un asesino de la creatividad”, como dice el
psicólogo Daniel Goleman, autor del libro: Inteligencia Emocional.
“Para mi la creatividad es una forma de pensar que me permite disfrutar
de la vida y darme cuenta que no hay límites para crecer como ser humano. La
incorporó a través de una actitud lúdica, curiosa y de búsqueda de espacios
nuevos que impliquen un desafío a lo ya acostumbrado, lo cual implica una tarea
constante de flexibilización que no es fácil, pero sin embargo, te hace ver lo
positivo de cada situación y te guía a encontrar soluciones a conflictos personales
o de otras personas”, revela la facilitadora.
En ese sentido el taller que dictará el próximo sábado 9 de noviembre,
está orientado a todo profesional o estudiante que trabaje con grupos de niños
pero por sobre todo que anhele transformarse interiormente. Ahora las dinámicas
a trabajar consisten en la exploración de las artes plásticas, la danza, la
música yoga, la meditación y juegos, con un marco teórico desde la psicología
positiva.
Cabe destacar además que Bárbara ejerce como psicóloga infantil en
Rukalihuen, y también realiza constantemente talleres para niñas y niños, donde
los principales beneficios que ha observado en sus alumnitos son el
fortalecimiento de la autoestima, la tolerancia a la frustración y las buenas
relaciones con otros pues permite canalizar su energía y emociones, sintiendo
la aceptación y apoyo del grupo.
Por ejemplo: un niño que derrama una témpera en una hoja y que
normalmente se enojaría mucho, rompiendo la hoja o llorando, puede ir
aprendiendo que existen “accidentes creativos”. Entonces el error se convierte
en un tremendo regalo, y así estos imprevistos pueden crear una nueva obra, así
han nacido las maravillosas recetas de cocina o grandes creaciones artísticas.
La premisa es que los fracasos no existen, son sólo cambios en el plan inicial.
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